Filipendula para tu salud
La filipendula es un planta herbácea perenne que incluye varias especies, estas son Filipendula vulgaris, Filipéndula ulmaria, ambas son nativas de Europa y por último Filipéndula rubra originaria de Norteamérica, todas pertenecen a la familia de las Rosaceae.
Características Morfológicas Filipendula
En líneas generales, estas plantas alcanzan una altura entre los 0,5 y 2 metros aproximadamente, sus flores son pequeñas y de un color que va de blanquecino al rosa pálido.
La Filipendula vulgaris tiene un tallo erecto que llega hasta los 80 centímetros de altura, tiene bastantes ramas y pocas hojas, las cuales son basales y tienen entre 8 y 25 pares de foliolos.
Sus flores tienen pétalos blancos y son de color morado por debajo, sus raíces y las hojas jóvenes se comen como verduras, generalmente crece en praderas y bosques abiertos.
La Filipendula rubra puede llegar hasta los 2,4 metros de alto, su follaje es bastante atractivo y cuenta con flores apiñadas de color rosa y una particular fragancia, incluso tienen un aspecto similar a las del melocotonero.
La Filipendula ulmaria también conocida como la reina de los prados, puede llegar hasta los 2 metros, tiene tallos simples aunque también pueden ser ramosos, sus hojas son basales y no tienen más de 5 pares de foliolos, las flores son de color blanco y crece en lugares muy húmedos como los pantanos.
Propiedades medicinales de la Filipendula
La filipendula tiene ciertas propiedades medicinales en cada una de sus variedades, por ejemplo, la especie vulgaris se emplea para tratar cuadros febriles, infecciones, la gota y el reumatismo.
La especie rubra se utiliza para tratar la diarrea, sangrado, disentería y los problemas del corazón, incluso se emplea como afrodisíaco, aunque su principal uso es en el campo de la ornamentación, debido a la belleza de sus flores y su agradable fragancia.
Ahora bien, la ulmaria es quizá la más empleada para el tratamiento de diferentes padecimientos, esta es un antiinflamatorio, analgésico, diurético, astringente, antiinflamatorio, antirreumático y antipirético, así que se usa para:
- Es ideal para resolver los problemas digestivos, ya que suaviza la mucosa del tracto. También neutraliza la acidez estomacal y calma las nauseas, incluso es un astringente suave, bueno para la diarrea.
- Tiene la capacidad de bajar la fiebre.
- Su poder antiinflamatorio lo hace excelente para los dolores de las articulaciones y los músculos.
- Alivia los dolores menstrual y de cabeza.
Remedios caseros con la Filipendula
Los remedios caseros son en la mayoría de los casos la mejor vía para aprovechar los beneficios de las plantas al organismo y a la salud. En cuanto a la filipéndula vulgaris, las flores se usan para preparar infusiones y en el caso de la rubra se utilizan sus raíces.
Con respecto a la Filipendula, se emplean las partes aéreas, puede ser la planta seca, también se usa su tintura y se puede encontrar en forma de comprimidos, se puede preparar remedios para el uso interno y externo.
Las infusiones se preparan con 2 cucharadas de la hierba seca en una taza de agua, una vez el líquido comience a hervir, se agrega la hierba y se retira del fuego de inmediato, luego se deja reposar durante 10 o 15 minutos y se consumen 3 tazas al día.
Para preparar cataplasmas se emplea la decocción de 30 gramos de la planta con un litro de agua, se calienta todo junto y cuando comience a hervir se apaga, se aplica con gasas. También resultan excelentes las compresas con las flores y hojas frescas.
Contraindicaciones de la Filipendula
Las contraindicaciones que se conocen son al respecto del uso de la Filipendula ulmaria, no se recomienda para mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, tampoco para menores de 12 años.
De igual manera, las personas con úlceras gastroduodenales, hemorragias o quienes estén bajo tratamientos con aspirinas u otros medicamentos para la circulación sanguínea no deben consumir esta planta. Siempre resulta recomendable consultar con el médico especialista para que aconseje el mejor remedio, las dosis y frecuencia.