Albahaca

La albahaca es una planta herbácea originaria de países como la India, Irán y algunas regiones tropicales de Asia. Su nombre científico es Ocimum basilicum y popularmente también se le conoce como alhábega. Pertenece a la familia de las lamiáceas y puede medir entre los 30 y 130 centímetros.

En cuanto a sus características morfológicas, se compone de tallos ramosos y velludos, sus hojas tienen forma ovada, son ligeramente dentosas y su color es de un verde brillante. Las hojas tienen textura bastante sedosa y al final de cada tallo tienen flores blancas o violáceas. Uno de sus rasgos más característicos es el olor intenso que emana.

Esta planta es perenne, es decir que puede vivir más de 2 años. Su cultivo se realiza a través de semillas y requiere de suelos húmedos y bastante agua. La siembra se realiza a principios o mitad de la primavera, pues es muy sensible al clima frío, así que necesita climas tropicales.

La recolección de la albahaca inicia en la etapa final de la primavera y acaba con el fin del verano. Luego comienza el proceso de conservación, con el secado de las hojas y su almacenamiento en recipientes herméticos. También se produce un aceite con las hojas y las flores a través de una técnica de destilación. Las hojas frescas se guardan en bolsas de plástico al vacío.

Cabe destacar, que su cultivo se inició en la India. Durante el siglo XVI llegó a Europa y más tarde a América. Su sabor es similar al del clavo y forma parte de la cocina mediterránea, donde se emplea tanto seca como fresca. Es estupenda para aderezar guisos de carnes, ensaladas, sopas de verduras y salsas para pasta. Incluso es el primer ingrediente de la salsa italiana de pesto.

Propiedades medicinales de la Albahaca

Esta planta contiene estragol, eugenol, cineol, linalo y timol. Estos componentes la hacen perfecta para la digestión, contribuye con la hernia de hiato y evita las flatulencias, es excelente para la gastritis. Asimismo, evita los malestares intestinales, combate el mal aliento y las llagas en la boca. Abre el apetito, elimina el vómito y estimula la producción de leche en mujeres embarazadas.

También, fortalece el sistema nervioso, ayuda a la circulación, evita la caída del cabello, reduce la fiebre y ayuda a eliminar el acné. Favorece los bronquios y es ideal para las gripes. De la misma manera, tiene propiedades analgésicas, calma el dolor muscular y es antiséptica.

Las partes más empleadas de la albahaca para el tratamiento de enfermedades y la preparación de remedios caseros son las hojas. Es importante resaltar, que en la antigüedad las raíces se usaban para aliviar el dolor del parto.

Remedios Caseros con Albahaca

Entre los remedios caseros que se realizan con la albahaca destacan las infusiones. Su preparación consiste en calentar el agua en una olla o cazo, una vez haga ebullición, se retira del fuego, se agregan las hojas, se tapa y se deja reposar por algunos minutos. Esto es excelente para el tratamiento de molestias intestinales y parásitos y se toma en ayunas.

Si se trata de aliviar la indigestión y la acidez, lo mejor es tomar una taza después de comer. Para las úlceras en la boca y el mal aliento, se preparan 100 gramos de hojas en un litro de agua, y con este líquido se hacen gárgaras.

También se puede hacer un masaje con el aceite, en forma circular sobre los músculos afectados. Incluso, sobre el abdomen para aliviar el dolor de ovarios. En el caso de calmar los nervios, se vierte una infusión de la albahaca en el agua del baño. Para fortalecer el cabello se prepara una infusión y se aplica sobre el cabello sin enjuagar.

Con el acné es igualmente fácil de usar, puede prepararse una infusión con la que se humedece una toalla limpia y se coloca sobre el rostro durante 15 minutos. También se pueden machacar las hojas, hasta formar una pasta y se aplica sobre la piel. Cuando hay dolor de cabeza es muy efectivo inhalar el aroma del aceite, poniendo unas gotas sobre un pañuelo.

Es importante resaltar, que el empleo de la albahaca tanto en comidas como en uso medicinal, debe ser en cantidades controladas y con una frecuencia sin excesos. Pues esta planta también implica algunas contraindicaciones.

Contraindicaciones de la albahaca

Esta hierba de uso milenario contiene en su aceite estragol, esto puede tener efectos tóxicos y hasta carcinógenos. Para quienes padecen de colon irritable, podría provocarles desordenes digestivos. A las mujeres embarazadas puede causarles contracciones uterinas. En algunos casos tiene la capacidad de dar dolor de cabeza, también funciona como narcótico y estupefaciente.

En términos de su uso externo, provoca enrojecimiento en la piel o dermatitis. Si hay brotes o heridas no se recomienda usar el aceite. De hecho, hay quienes tienen plantas de albahaca en masetas o huertos, pues su aroma funciona como un extraordinario insecticida, debido al estragol y eugenol.